- Referencia:
- 81764
- Publishing house :
- PPC EDITORIAL
- Year of edition:
- 2015
- Matter
- Christocentric Spirituality
- ISBN:
- 978-84-288-2828-4
- Alto:
- 210mm
- Ancho:
- 130mm
- Pages :
- 112
- Binding :
- Rústica
- Collection :
- PASTORAL
AL ESTILO DE JESÚS
UNA PROPUESTA PARA TIEMPOS DE CRISIS
LUCIANI, RAFAEL
1. Discernir nuestra humanidad como lo hizo Jesús de Nazaret 1. Regresar a la praxis fraterna de Jesús 2. Humanizar la vida, fraternizar las relaciones 3. La compasión que nace de la fraternidad2. Ser honestos con la realidad 1. El peso de la realidad 2. Cambiar para dar vida 3. La compasión antes que el arrepentimiento 4. Aligerar el peso del vivir3. Un poder para servir y liberar 1. El acompañamiento aligera la carga 2. Del reino del César al Reino de Dios 3. Un estilo de vida a la altura de los tiempos 4. Una humanidad mesiánica 5. ¿Autoritarismo o servicio? 4. ¿Religión o religación? 1. Del sacrificio cultual a la compasión fraterna 2. Las palabras que usamos 3. No hay espiritualidad sin fraternidad 4. Construir proyectos trascendentes5. Jesús ante los problemas de la sociedad 1. Constructores de la paz y defensores de las víctimas 2. Nuevas tentaciones: la violencia y el odio 3. Nuevas tentaciones: la mentira y la corrupción 4. Nuevas tentaciones: el poder del dinero6. Apostar por una sociedad más humana 1. Nuestras relaciones a la luz del reinado de Dios 2. Discernir nuestra humanidad para humanizarla 3. Vivir con el mismo espíritu de Jesús 4. El camino de la reconciliación social 5. Salir de la propia familia en busca de una mayorConclusión abierta. De la indolencia a la esperanza
Los cristianos creemos que la práctica histórica de Jesús es el criterio de discernimiento para comprender nuestra relación con la política, la economía y la religión, así como las relaciones cotidianas familiares y laborales en las que nos desenvolvemos. De ese modo aprendemos que la vida de cada persona es sagrada y que todo vínculo debe buscar la humanización en el marco de una libertad corresponsable que nos haga sujetos y no objetos o súbditos de alguien. Debemos regresar a Jesús de Nazaret, leer los evangelios, preguntarnos si nos relacionamos personalmente con él o, por el contrario, si apenas nos limitamos a practicar la formalidad del culto. Al meditarlo, recordaremos que Jesús se dio a todos por igual, que nunca antepuso la condición social, política o moral de alguien para acogerle y amarle.