Este libro compendia la doctrina patrística sobre el Espíritu Santo, desde el significado de la palabra Espíritu para los Padres de la Iglesia, hasta la Encarnación, su divinidad y su presencia en la Iglesia, pasando por su faceta creadora y su relación con los profetas. Con referencias a numerosas citas de los Padres -Justino, Tertuliano, Hilario de Poitiers, Ireneo de Lyon, Orígenes, Atanasio, Cirilo de Jerusalén...- y acompañado de las imprescindibles aclaraciones etimológicas, constituye un interesante acercamiento a la que tal vez sea la Persona más desconocida de la Trinidad.