La nostalgia de "lo tradicional" y el miedo ante "lo innovador" caracterizan la visión actual de la vida consagrada.
¿Dónde se encuentan el "vino nuevo" y los "odres nuevos" de esta peculiar forma de vida? Buscar a Dios, confesar su nombre y participar en su misión son las constantes vitales de una identidad que anhela vivir la comunión dentro de una nueva eclesialidad y desde una nueva conciencia planetaria. El presente libro ofrece, a modo de ensayo, una perspectiva sugerente sobre este argumento, tratando de escrutar los procesos "in fieri" que apuntan hacia un "novum" en la vida consagrada.