- Referencia:
- 116183
- Editorial:
- CIUDAD NUEVA
- Any d'edició:
- 2024
- Matèria
- Patrística
- ISBN:
- 978-84-9715-583-0
- Alto:
- 230mm
- Ancho:
- 150mm
- Pàgines:
- 336
- Enquadernació:
- Cartoné
- Col·lecció:
- FUENTES PATRÍSTICAS
A LA ESPOSA - EXHORTACIÓN A LA CASTIDAD - LA MONOGAMIA
TERTULIANO
El presente volumen presenta lo que se podría llamar la trilogía de Tertuliano sobre el matrimonio, constituida por los escritos A la esposa, Exhortación a la castidad y La monogamia. El hecho de que Tertuliano escribiera tres obras dedicadas al mismo argumento atestigua que se trataba de un tema que, además de la importancia de la que gozaba en la civilización romana, estaba en el candelero en el ámbito cristiano. Y es que se trataba de una institución de la vida cotidiana en la que se ponía en juego la propia comprensión de la fe, en un contexto de polémica entre las distintas corrientes cristianas y en contraste con los usos del mundo pagano. En particular, tres cuestiones resultaban problemáticas: el valor del matrimonio en sí mismo, de la procreación y de la familia; la licitud y oportunidad de las segundas nupcias, una vez que uno de los cónyuges había fallecido; y la licitud de los matrimonios mixtos.
El itinerario personal de Tertuliano se refleja en la composición de los tres escritos. Mientras que A la esposa pertenece a la época católica de Tertuliano, Exhortación a la castidad se suele situar en su período de transición, cuando ya en contacto con el montanismo, no ha roto todavía con la católica. Por fin, La monogomia supone el culmen de la trayectoria de Tertuliano, ya inserto plenamente en la Nueva Profecía. Progresivamente el Africano extrae todas las consecuencias rigoristas que en su primera obra estaban en cierta medida todavía implícitas o en germen.
La argumentación de Tertuliano despliega, además de sus habituales recursos retóricos, una amplia exégesis escriturística, por medio de la cual desea fundamentar su enseñanza con el sello de la palabra divina, en particular del testimonio apostólico y, sobre todo, de san Pablo.