La búsqueda de Dios es una de las categorías más importantes de la Biblia, y con su fidelidad o sus tropiezos, la memoria de los buscadores de Dios pervive como un testimonio de fe. Pero lo más importante es que, pasados los siglos, nos reflejan y nos interpelan sobre cómo se refleja su búsqueda de Dios en mi propia búsqueda. Todavía hoy, ellos orientan nuestra oración y nuestro compromiso de fe.