La Madre Teresa fue una maestra de vida para todos los que la conocieron y lo sigue siendo todavía hoy para miles y miles de personas. Este libro reconstruye, a través de sus escritos, testimonios y documentos inéditos, la influencia de la educación familiar en la vida y la obra de la Madre Teresa. La joven Agnes Bojaxhiu tuvo a su madre como modelo de caridad y generosidad, y a su tierra, Albania, como ejemplo de convivencia y tolerancia religiosa. De todo ello surge una llamada a calmar la sed de Cristo en los pobres, una invitación a llevar la sonrisa de Dios a los que sufren. Para el lo, la joven Agnes Bojaxhiu tuvo que vivir la purificación de la "noche oscura", la de los místicos, y así se convirtió en la Madre Teresa, encargada del levar la esperanza a los más necesitados. Sabedora de que su obra no cambiaría el mundo, la Madre Teresa se contentó con ser " una gota de agua limpia en la cual pudiese reflejarse el amor de Dios".